Seguridad y garantía: una expectativa para el cliente
Un aplicador trata con un cliente que solicita seguridad y garantía extendida en parte de un proyecto con problemas persistentes de filtraciones.
La ausencia de filtraciones es una expectativa razonable para el cliente, que espera seguridad y garantía.
El autónomo aplicador consultó con sus compañeros: un cliente me ha pedido que ofrezca seguridad y garantía extendida para una parte de un proyecto. Probablemente ha tenido algunos problemas persistentes de filtraciones. ¿Alguno de ustedes ha tenido que hacer eso o algo similar y, de ser así, pueden compartirlo?
La respuesta de algunos fue, que los clientes compran y esperan muchas cosas del contratista autónomo. Entre ellas seguridad y garantía y también que no haya filtraciones.
La ley dice que un contratista es responsable de problemas obvios durante tres años y por defectos latentes, no inmediatamente obvios, durante 10 años.
Debido a ese límite de 10 años de responsabilidad, hay abogados en demandas colectivas que buscarían clientes en comunidades de propietarios y consorcios de edificios. Además entablarían una demanda en el año nueve contra cualquier persona que estuviera relacionada con el proyecto. Así incluidos, el promotor, el arquitecto, el ingeniero y el contratista.
Algunos casos reales
Después de un incendio importante en la ciudad, una empresa construyó varias casas. Uno de los clientes se puso en contacto con la oficina de uno de los constructores, nueve años después de que construyeran su casa. Ello para hacerles saber que la tubería de agua goteaba, de una luz empotrada en la sala de estar.
Se hicieron algunas pruebas de agua y se determinó que era de la ducha del segundo piso. Cuando se retiraron las baldosas y el lecho de hormigón, quedó claro que la impermeabilización en una esquina difícil se había hecho de forma incorrecta. Finalmente se arreglaron los problemas, sin costo alguno para el cliente.
En otra oportunidad, el cliente tuvo la vivienda, esencialmente reformada. Concretamente todo fue reemplazado y actualizado la estructura y los cimientos. Luego se instalaron todos los nuevos acabados y accesorios, exteriores e interiores.
Después de un período de varios años, una filtración apareció en el techo justo encima de donde el cliente dormía, en el dormitorio. Asimismo, parecía estar relacionado con el revestimiento de ladrillo alrededor de la chimenea y la cubierta de techos.
Casi dos intentos de remediar el problema no funcionaron. Uno de ellos incluía la eliminación de parte del techo de la habitación y la prueba de agua del techo.
Al final, esto llevó a rehacer juntas entre el techo y aplicación de morteros específicos nuevos, tampoco se solucionó el problema.
Eventualmente, los aplicadores empezaron a buscar en internet sobre la mejor manera de manejar los materiales. Después, al hacer esto, se dieron cuenta de que la impermeabilización detrás del ladrillo probablemente no estaba resuelta correctamente en las juntas entre el techo y el ladrillo.
La seguridad y garantía extendida NO es la solución
La seguridad y garantía extendida NO son la solución, rehacer las instalaciones fallidas y/o añadir lo necesario para evitar que el agua se filtre, son soluciones razonables que dejan a su cliente con la sensación de que obtuvo lo que pagó, lo cual no es una fuga.
El negocio puede ser muy frustrante, las filtraciones hay que resolverlas y seguir adelante.
De esta manera, es una locura estar en este negocio. Hay tantas variables. Por lo general, todas las partes involucradas quieren que todo salga bien.
Sin embargo, muchas veces los especialistas tienen que lidiar con proyectos con problemas, que suelen venir con clientes difíciles.
Todo lo que hay que hacer es dar seguridad y garantía y resolver los problemas.
Finalmente, averiguar cómo NO repetir esa experiencia de aprendizaje. Fácil de decir. Aunque es difícil vivirlo.
